Cuando pensamos en viajes internacionales, en México a veces una de las opciones más sencillas es Estados Unidos. Se trata de un país donde la enorme extensión territorial se traduce también en una diversidad deliciosa de paisajes, culturas y gastronomías, las cuales vale la pena descubrir de a poco. Si bien destinos como Nueva York, Los Ángeles y Chicago son algunos de los más populares entre los viajeros, el estado de Colorado es un microcosmos que lo tiene todo: valles, montañas, bosques, lagos, grandes ciudades, pueblos pequeños, exquisita gastronomía, historia, hoteles de lujo, boutiques. Si quieres hacer un viaje realmente único, este roadtrip por Colorado es apto para prácticamente todos los gustos.
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Denver
Por supuesto, lo más sencillo será comenzar tu roadtrip por Colorado en la capital del estado. Denver es una ciudad cosmopolita que, aunque a veces se nos escapa del radar cuando pensamos en las grandes urbes de Estados Unidos, sin duda te sorprenderá con sus barrios llenos de personalidad, su oferta gastronómica, la calidez de su gente y su cultura vibrante. No te pierdas la oportunidad de descubrir los murales callejeros en el barrio de RiNo, la recién remodelada Union Station, los edificios victorianos y boutiques independientes en Highland, y la vida nocturna de City Park y Uptown.
Fort Collins
Bastará con manejar una hora para llegar a Fort Collins, un destino encantador ubicado en las faldas de las famosas Rocky Mountains. Si bien se trata de la segunda ciudad más grande del estado, conserva la atmósfera serena de los pueblos un poco más pequeños, además de que es sede de la Universidad Estatal de Colorado, por lo cual mantiene un ambiente jovial y relajado. Fort Collins tiene una veta gastronómica destacable, con restaurantes, cafeterías, cervecerías y montones de comercios locales. Además, es una ciudad perfecta para moverse en bicicleta, pues cuenta con una gran ciclovía que recorre las áreas naturales de la ciudad, e incluso va en paralelo al río durante unos metros.
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Loveland
Este rinconcito entre Fort Collins y Denver será la escala perfecta en la ruta de este roadtrip por Colorado. Se trata de un pequeño pero encantador pueblito particularmente imperdible si estás enamoradx, si te encanta el arte o si amas los caballos. En primer lugar, dirígete a las enormes letras conmemorativas —las cuales deletrean simplemente ‘Love’—, pues en la parte posterior podrás colocar un candado para sellar tu amor. Después, puedes pasear por el Benson Sculpture Garden, un gran parque a lo largo del cual se acomodan alrededor de 200 esculturas de artistas locales. Finalmente, vive un sueño vaquero en el rancho Sylvan Dale, donde podrás dar paseos a caballo, subir la montaña y disfrutar de una carne asada mientras admiras el atardecer.
Vail
Si bien este rincón es particularmente atractivo para lxs viajeros durante el invierno, Vail es un pueblo en la montaña cuyo encanto no decrece en ningún momento del año. Durante buena parte del año, la nieve lo cubre todo y ofrece una atmósfera sofisticada y acogedora donde el lujo está a la orden del día. Este pueblo de estilo europeo se desarrolló a mediados del siglo XX con la intención de convertirse en un resort de ski; no obstante, la primavera, el verano y el otoño son igual de mágicos, sobre todo para disfrutar de la naturaleza —tanto en el bosque como en el jardín botánico— y del encanto chic de sus boutiques.
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Aspen
Continúa tu roadtrip por Colorado en dirección a Aspen, a lo largo de una carretera panorámica que serpentea entre las montañas. En tan solo dos horas, llegarás a este precioso pueblo donde además del glamour y el lujo de sus tiendas, hoteles y restaurantes, encontrarás un sitio cargado de historia, con edificios cuyas construcciones se remontan a finales del siglo XIX. No te olvides de pasar al bar del Hotel Jerome para probar los Aspen Curds, un coctel inventado durante la época de la prohibición que consiste en una malteada de vainilla con whisky local. Para la cena, Element 47 es un restaurante ubicado en el hotel The Little Nell y recomendado en la Guía Michelin, donde se enaltecen los sabores y los ingredientes locales, y donde además encontrarás una cava que resguarda alrededor de 20,000 botellas y que ha sido premiada como la mejor cava en un hotel en el mundo.
Grand Junction
Finalmente, Grand Junction es un destino perfecto para bajar el ritmo hacia el final de tu roadtrip por Colorado. Esta ciudad recibe su nombre por ubicarse en el punto de encuentro entre el río Colorado y el río Gunnison, y quizá su atractivo principal sea que a solo 15 minutos, se encuentra el Colorado National Monument, un enorme cañón repleto de miradores desde los cuales se pueden apreciar las capas geológicas que narran una historia de millones de años, así como enormes monolitos que se alzan imponentes sobre el piso. Por la noche, descubre la destacable y relajada oferta gastronómica del restaurante Bin 707, y termina con una cerveza artesanal en The Rockslide Brew Pub.