Coyoacán es una de las zonas de la CDMX que alberga infinidad de tesoros escondidos, listos para revelarse a aquellos que se aventuran a caminar por sus calles empedradas. Para encontrar Maratea más vale guiarse por el olfato y seguir el aroma del pan y el café, hasta dar con este localito precioso con un candelabro de ensueño, una fuente al centro del patio y el ambiente ideal para acomodarte en tu silla y platicar por horas entre amigas.
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El menú salado de Maratea es delicioso, así que se presta bien para desayunar, brunchear, comer o incluso cenar. Lo primero que notas apenas entras al restaurante es la vitrina con pan dulce, postres y pasteles dignos de ilustrar un cuento de hadas, especialidades de la casa y perfectas para acompañar con un buen café de altura para crear el balance perfecto, o bien una buena plática llena de ‘chismecito’. Si quieres comenzar con algo salado, siempre recomendaremos probar los chilaquiles verdes, una delicia.
El menú dulce ofrece delicias para el paladar y los ojos, y entre los imperdibles destacan la Pavlova con berries, la crosttata de mermelada de frutos rojos y la copa de helado vintage para combatir el calor y sentirte en el cuento de ‘Hansel y Gretel’. Pueden acompañar sus postres con el clásico café o capuccino, o probar un trago de la coctelería de la casa. Otro imperdible súper refrescante para lxs amantes de las especias es el lassi al cardamomo.
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Lo mejor de todo es que podrás elegir entre sentarte adentro —rodeado de un ambiente acogedor con luces cálidas y acabados elegantes y románticos— o en su patio repleto de plantas y flores, con mesitas de mármol y el murmullo de la fuente al centro —si traes a tu perrito, esta es la mejor opción—. Arriba de Maratea se encuentra Utópicas, una librería y tienda feminista dedicada a la promoción y difusión de libros escritos por y para mujeres y disidencias, donde también encontrarás montones de ‘merch’ y productos hechos por comunidades indígenas, el lugar ideal para cerrar con broche de oro una tarde de amigas.
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