Ubicado a solo un par de cuadras del malecón, este restaurante de espíritu tradicional que no solo te hará viajar en el tiempo sino también en el espacio para transportarte a Nápoles en el siglo XX. Sin embargo, no es necesario cruzar el Océano Atlántico para comer aquí, sino simplemente viajar a Baja California. Datoni es un restaurante italiano en Ensenada que se robará tu corazón con su cocina honesta y apapachadora, pero también con su decoración clásica que te hará sentir en una película del neorrealismo italiano.
Una de las cosas que es importante tener en cuenta antes de tu visita a Datoni es que, cuando decimos que en este lugar las cosas se hacen a la antigua, nos referimos también a esa espontaneidad de la operación de los restaurantes de antaño. Para empezar, en este restaurante italiano en Ensenada no se aceptan reservaciones —pero si deseas llamar antes de ir para asegurarte de que tengan una mesa libre, puedes marcar con 30 minutos de antelación y sí que te guardarán el espacio— y el pago es solo en efectivo. Por otro lado, te recomendamos leer muy bien el menú antes de pedir, pues no será posible hacer modificaciones a ninguno de los platos.
Ahora bien, este restaurante italiano en Ensenada es un proyecto del chef Anthony Petracca, cuyas raíces italianas lo llevaron a abrir este bistró de platillos simples y cocina directa que no busca sumarse a las tendencias del momento, sino consentir a sus comensales con recetas tradicionales llenas de sabor y una atmósfera casual y despreocupada. Por otro lado, si bien la inspiración de la cocina de Datoni es netamente italiana y hay uno que otro ingrediente importado en su alacena, también se asumen orgullosamente ‘bajadenses’ y buscan integrar lo mejor del producto local (de modo que sobra decir que aquí los vinos y los mariscos son garantía).
Además de la carta fija —la cual puedes consultar con antelación en sus redes sociales—, cuentan también con un pizarrón en el que se anuncian algunos platillos de temporada a los que vale la pena estar pendientes, como el Crudo de Atún Aleta Azul con Prosciutto. Por supuesto, los productos del mar no pueden fallar, y menos estando tan cerca de la bahía —de hecho, a solo unos pasos de este restaurante italiano en Ensenada se encuentra la famosísima carreta de la Guerrerense—, por lo que te recomendamos no perderte las almejas chicas en caldo de habanero.
Por otro lado, aquí las pastas hechas en casa son un atino seguro, como el Tonarelli con tinta de calamar y caviar, o el Pesto de Chile Serrano y Jalapeño, uno de los favoritos de los comensales a pesar de que, según el chef, dio con esta receta más como un juego, sin esperar que tuviera tanto éxito. Por otro lado, para los más intrépidos, los ravioles de cachete de res con salsa de hígado o los de cerebro de cordero y queso ricotta son una bomba de sabor y texturas que te dejarán deseando más.
Por supuesto, en ningún restaurante italiano digno de llamarse así puede faltar el postre. Para quienes aman los clásicos, y más en los días calurosos, el affogato preparado con helado de vainilla hecho en casa y servido con espresso es una excelente opción. Si te gusta probar cosas nuevas y disfrutas de los sabores un poco más intensos, entonces la Panna Cotta de azafrán y naranja será el final perfecto para una comida magnífica en este restaurante en Ensenada.
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