Pocas cosas nos emocionan más que cuando dos de nuestros proyectos favoritos se unen para armar una colaboración del todo memorable. Esta vez, Abeja Reyna y La Caja de Cristal —dos marcas mexicanas con proyectos que comparten su pasión por el producto nacional— presentan dos bebidas que fusionan lo mejor del café de Oaxaca y de la miel orgánica producida de forma artesanal. Si eres amante del café, no te puedes perder las dos presentaciones del nuevo Honey Latte que la cafetería más apacible de Polanco está preparando para endulzar la primavera.
Primero que nada, hay que hablar un poco más sobre los proyectos detrás de esta dulce colaboración. En primer lugar, Abeja Reyna es una marca 100% mexicana de apicultura sustentable que nació como un proyecto familiar en Guadalajara en 1987. Después de casi tres décadas de innovación y aprendizaje, siguen siendo pioneros en la elaboración de productos hechos a base de miel, los cuales van desde miel en polvo (la única en el mercado) hasta tratamientos faciales. Hoy en día, protegen a más de 80 millones de abejas en sus apiarios y trabajan en alianza con 120 apicultores alrededor del país que comulgan con su filosofía sustentable y libre de crueldad.
Por otro lado, La Caja de Cristal es una cafetería de especialidad en Polanco cuya atmósfera apacible y sus espacios bañados de luz natural se prestan de maravilla para hacer home office. Este lugar muestra su compromiso con la promoción del café mexicano trabajando con comunidades cafetaleras en Puebla, Veracruz, Chiapas y Oaxaca. Además, cuentan con un menú conciso pero variado para saciar todos tus antojos y acompañar tu taza de café con platos sencillos pero bien hechos.
Esta vez, La Caja de Cristal y Abeja Reyna se anticipan a la temporada primaveral con una bebida que, esperemos, se quede en el menú para siempre. Se trata de un Honey Latte en dos presentaciones, fría y caliente dependiendo del clima con el que amanezca la ciudad. Aunque no lo creas, la experiencia de beber cada uno es muy distinta y no se trata solo de la temperatura. Esencialmente, ambas bebidas son iguales: café de Oaxaca con notas dulces, endulzado frente a tus ojos con miel de abeja orgánica y coronado con una pequeña penca (es decir, un pedacito de panal) que vas mordiendo para descubrir el elíxir dorado que guarda dentro. La fiesta de texturas tiene todo que ver con qué tan rápido o lento se disuelve la miel en la taza, de modo que cada trago es una experiencia distinta.
¡Disfruten y compartan!