Seguramente has soñado con despertar en una habitación de hotel que cuente con alberca incluida, en la que puedas gozar de la privacidad y del placer, a solas o en compañía de quien tú quieras. Bueno, esas fantasías pueden cumplirse en el paraíso tropical del Hotel Milam en Tulum, Quintana Roo, un santuario natural que promete dejar recuerdos inolvidables para nutrir el bienestar de cada uno de sus huéspedes. Entre sus manifiestos está el de crear atmósferas que fomenten la inspiración para profundizar en los sueños y en los deseos más íntimos. Y aquí te compartimos los detalles.
Las villas y residencias de este hotel son una perfecta combinación de lujo, comodidad y naturaleza en el corazón de la selva de Tulum. Las villas, que cuentan con alberca dentro de la habitación, ofrecen un santuario privado para disfrutar del entorno, con una arquitectura impecable dignas de este paraíso natural. Sus piscinas, en forma de media luna cuentan con escalones para sentarse cómodamente y son bastante amplias para quienes prefieran extenderse a lo largo y ancho o flotar sobre el agua cristalina, además, gozan de un ventanal de pared que da hacia la vegetación de la zona.
Pero si deseas una estancia más larga, también están las residencias, aptas para ir con más personas, cuentan con hermosas vistas a la jungla y muebles exquisitos que brindarán la mayor comodidad. También cuentan con alberca privada fuera de la habitación para quienes disfrutan de relajarse al aire libre. Así que, ya sea que elijas el aislamiento íntimo de las villas o la amplia elegancia de sus residencias, encontrarás un refugio perfecto para conectar con tu interior. Si deseas salir de tu habitación, podrás relajarte junto a una piscina prístina que está rodeada de exuberante vegetación y en donde encontrarás cómodas tumbonas que ofrecen un escape idílico para el disfrute y el rejuvenecimiento.
Y para seguir en este sueño también podrás experimentar la mejor cocina tradicional en el restaurante Milam, que ofrece a sus huéspedes una experiencia culinaria en donde cada platillo es elaborado con pasión y cuidado. Además, sus espacios de comedor proporcionan el entorno perfecto para disfrutar de los alimentos rodeado de la naturaleza. Apasionados por la riqueza de las culturas antiguas del budismo y la esencia del patrimonio maya, el Hotel Milam te invita a descubrir su Samsara Room Bar, que ofrece cócteles característicos, cada uno elaborado artísticamente para reflejar una etapa del Samsara –el ciclo eterno de nacimiento, vida, muerte y renacimiento–. Así, mientras saboreas cada sorbo, la música tibetana y maya te llevarán por un viaje transformador a un lado de la piscina.
Como se trata de un lugar para soñadores, algo de lo que más destaca es su Xunán Spa, un santuario de bienestar holístico que abraza tradiciones ancestrales para ofrecer experiencias únicas y enriquecedoras. Entre sus tratamientos y terapias están: las clases de yoga y sesiones de meditación, curaciones de Temazcal, sonidos serenos del Sound Healing y la energía dinámica del Animal Flow. No lo pienses y date la escapada de tus sueños en un ambiente inmersivo que despertará tus sentidos.