En los últimos años, parece haberse dado una lenta pero notoria homogeneización en la estética y la propuesta de las nuevas cafeterías de la ciudad. Si bien esto no es necesariamente negativo, siempre da gusto encontrarse con un rincón cargado de identidad donde el espacio proyecta las pasiones e intereses de toda una comunidad. Caminando por la calle de San Luis Potosí en la Roma, Mugen Café es una barra de especialidad diminuta que bien podría pasar desapercibida si no fuera por la música, la atmósfera vibrante y el aroma intenso y delicioso que emana de su interior.
Un espacio pequeño con una experiencia enorme
Como ya mencionamos, Mugen Café es un espacio pequeñito de apenas unos cuantos lugares en la barra un puñado de mesitas sobre la banqueta. Sin embargo, detrás del proyecto reluce la enorme experiencia de Emilio Acosta, cofundador de esta barra de especialidad en la Roma y finalista en dos ocasiones de la competencia nacional de baristas Brew Bar de la Asociación Mexicana de Cafés y Cafeterías de Especialidad. En otras palabras, uno de los mejores baristas del país. Basta con charlar con él un momento para darse cuenta de que aquí nada es aleatorio y la experiencia no solo busca servir un buen café, sino de que es perfectamente consciente de las cualidades y las técnicas de cada método de extracción.
Sin embargo, no importa ser todo un experto para pedir la mejor taza en esta barra de especialidad en la Roma, pues el producto es bueno de origen y el blend que preparan en casa logra un balance perfecto de granos lavados y naturales que resalta las notas ácidas, frutales y aromáticas del café. Mugen Café trabaja de la mano con un tostador del Estado de México especializado en catación Q, quien a su vez mantiene un vínculo estrecho con pequeños productores de café en Veracruz, de modo que cada taza que sale de sus cafeteras está preparada con granos 100% mexicanos y cuidadosamente seleccionados.
Un lugar sin límites (para todos los gustos, para toda ocasión)
El nombre Mugen proviene de dos kanjis japoneses que al unirse se traducen como ‘sin límites’. Esta filosofía se extiende por todo el local para estallar en un montón de detalles que terminan por articular una identidad compleja pero totalmente amigable, que resulta tener todo el sentido del mundo. Por ejemplo, la pasión del otro cofundador, Jesús Mayorga, por la música: Mugen Café cuenta con una variada colección de vinilos que puedes comprar, o simplemente tomarlos prestados para tocarlos en su tornamesa y armar tu propia sesión en vivo. Si eres fan de Japón, seguramente reconocerás los guiños a distintos animes y elementos de la cultura pop nipona en sus paredes y en su vajilla.
Lo que por las mañanas es una apacible barra de especialidad para tomar una bebida caliente y desayunar algo por las tardes se convierte en un spot desenfadado para ir por un postre y un trago a base de café. Su carta de mixología ofrece delicias como el Carajillo —preparado con Cold Brew de la casa que le da a la bebida un sabor a chocolate envinado—, el Café Escocés, el Gin Tonic de Matcha o de Cold Brew, y el famoso Ron-chata con café.
El menú de Mugen Café
Si bien esta barra de especialidad en la Roma se presta de maravilla para ir por un café para llevar, te recomendamos darte la oportunidad de detenerte a probar su menú de brunch. Los platos podrán parecer sencillos, pero fueron diseñados para ser el acompañamiento perfecto para cada taza. El Croque MadaMUGEN —el tradicional Corque Madame con jamón, queso y huevo, que aquí se prepara también con mermelada de tocino— y el Bagel Popeye —con espinaca, arándanos, quesos frescos, aderezo de miel, jitomate deshidratado y chips de plátano— son favoritos entre sus comensales, y si te gusta empezar el día con algo dulce, el Pan Francés de frutos rojos con costra de caramelotambién es una delicia.
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