Desde que comenzó el 2025, el aire y el clima han hecho que el cielo de la Ciudad de México y el área metropolitana estén mucho más despejados, regalándonos vistas increíbles del amanecer y el atardecer. Pero los protagonistas, como siempre, son los majestuosos volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl, cuya belleza se ve aún más impresionante cuando están cubiertos de nieve. Ya sea que los hayas visto en persona o te hayas topado con alguna foto en redes sociales, seguro te has maravillado con su imagen. Lo mejor es que este espectáculo seguirá siendo visible en febrero, cuando el invierno aún está presente y las temperaturas mantienen el cielo despejado. Si quieres disfrutar de estas vistas sin los cables o los edificios de la ciudad, aquí te compartimos algunos lugares altos en la CDMX desde donde podrás admirarlos mejor.
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Mirador del Cerro del Tepeyac
El Mirador del Cerro del Tepeyac se ubica en el perímetro del Santuario de la Basílica de Guadalupe y es uno de los mejores lugares para admirar casi en su totalidad la Ciudad de México, incluyendo los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl, especialmente si el día está despejado. Para llegar, debes subir un camino de 250 escalones, rodeado de jardines y puentes de piedra, hasta llegar a la Capilla del Cerrito y sus terrazas. Desde allí también puedes ver el Ajusco y la Sierra de las Cruces. El mirador está muy bien acondicionado, con balcones y varios puestos de antojitos, lo que te permite pasar horas disfrutando del lugar. Lo mejor de todo es que está casi al centro capital, y no tienes que ir muy lejos para llegar.
Mirador del Cerro de la Estrella
El Cerro de la Estrella, ubicado en el centro de Iztapalapa, es un lugar ideal para disfrutar de unas vistas espectaculares de la Ciudad de México, ¡y de los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl! Después de su renovación en 2020, el mirador ofrece bancas cómodas donde puedes pasar horas admirando el paisaje. Además, en la cima no solo disfrutarás de una vista increíble, sino que también encontrarás una zona arqueológica con vestigios de templos prehispánicos, lo que hace la visita aún más interesante. La subida es tranquila, un poco cansada, pero vale totalmente la pena. Si eres madrugador, te puedes unir a muchos que suben temprano para ver el amanecer. Y si eres amante de la naturaleza, este lugar es perfecto para convivir con ella, además de que puedes llevar a tu perrito.
Mirador Picacho Ajusco
Este mirador, ubicado en el Parque Nacional Totolapan en el Ajusco, es otro de los mejores puntos para admirar los imponentes volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl. Gracias a su altura, los volcanes a menudo parecen estar rodeados por un mar de nubes, lo que le da un toque mágico a la vista. Además, recientemente instalaron unas casitas de vigilancia desde donde puedes disfrutar de una panorámica aún más completa, tanto del bosque como de la ciudad. Lo mejor es que, al ser un mirador poco conocido, no tendrás que preocuparte por las multitudes. Y entre las vistas impresionantes, estarás rodeado de paisajes boscosos y las enormes montañas que lo rodean.
Volcán Tetlalmanche
¿Habías pensado en disfrutar la vista de los volcanes desde la cima de otro volcán? Pues en el Volcán Tetlalmanche, en Iztapalapa, es totalmente posible. Subir hasta la cima toma unos 40 minutos y, desde allí, tendrás una vista panorámica impresionante de la ciudad y sus volcanes. Pero lo mejor es la experiencia en sí misma, aquí los locales ofrecen un tour de turismo regenerativo, donde te guían hasta la cima para ver el amanecer o el atardecer. Al llegar, te dan un box lunch para que disfrutes de un tentempié mientras contemplas el paisaje. Subir este volcán no solo te regalará vistas espectaculares de los volcanes cercanos, sino también una perspectiva única de Iztapalapa.
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Cerro Moctezuma en Naucalpan
Aunque no está exactamente en la Ciudad de México, se encuentra muy cerca, en Naucalpan, y es la opción perfecta si vives al norte del Estado de México. Este cerro es otro excelente lugar para admirar la belleza de los volcanes. El acceso es público, y la subida toma alrededor de una hora. Desde la cima, disfrutarás de una vista panorámica de 360º: por un lado, el Estado de México, y por el otro, la Ciudad de México, así que ver los volcanes está más que asegurado. Además, este cerro es una zona arqueológica protegida por el INAH, ya que en sus laderas se han encontrado vestigios de antiguas civilizaciones que habitaron la región. Es un cerro bastante especial, poco conocido, pero absolutamente hermoso.
¡Admira el Popocatépetl y el Iztaccíhuatl desde estos lugares!