A solo unas horas de la CDMX, Puebla es una ciudad que desde la época de la colonia se convirtió en una de las paradas más importantes en la ruta de Veracruz a la capital. Todo ese esplendor se conserva en sus calles y edificios antiguos, y aunque esta ciudad no ha dejado de crecer y modernizarse, gran parte de su identidad todavía se basa en ese pasado glorioso y de tradiciones vigentes. En pleno corazón de la ciudad, se encuentra Casareyna, un restaurante y hotel en el Centro Histórico de Puebla que conserva ese encanto de antaño y la arquitectura original de las casas virreinales.
Ya sea que estés buscando el hospedaje más romántico para una escapada en pareja, o que más bien quieras un sitio amplio y agradable para hospedarte con toda tu familia —incluidas tus mascotas—, Casareyna es una excelente opción. Sus habitaciones son espaciosas y se encuentran rodeadas de patios interiores que nos recuerdan a las antiguas casonas coloniales, y sin duda querrás apartar un día en tu itinerario solamente para descubrir todas las maravillas que este hotel tiene para ofrecer.
Las casonas de los siglos XVI, XVII y XVIII
Gran parte de la magnificencia de este hotel en el Centro Histórico de Puebla proviene de su arquitectura, pues está ubicado en un conjunto de edificios de los siglos XVI a XVIII, muy cerca de la Catedral y del barrio de Los Sapos. Casareyna se articula como un laberinto de arcos de piedra y muros robustos reinventados bajo un proyecto dirigido por el aclamado arquitecto Ricardo Legorreta y el artista Esteban Chapital. La tradición y la modernidad se encuentran en un punto medio que hace especial hincapié en el legado cultural de Puebla, pero también en la comodidad absoluta de los huéspedes.
Casareyna trabaja mano a mano con su empresa hermana Talavera de la Reyna, la cual promueve y difunde esta tradición artesana típica del estado. Los huéspedes tendrán la oportunidad de visitar el taller de producción para conocer el proceso de fabricación de estas piezas de inicio a fin, e incluso participar en la elaboración de su propia pieza. Además, también cuentan con una boutique con precios de fábrica donde podrás adquirir desde pequeños detalles hasta vajillas completas y piezas de artista.
Un oasis en el Centro Histórico de Puebla
Además de los patios y jardines, la terraza en el tercer piso es uno de los espacios con los que este hotel en el Centro Histórico de Puebla consiente a sus huéspedes después de un día explorando la ciudad. Ahí encontrarás la alberca y el jacuzzi, que aunque se encuentran al aire libre, están lo suficientemente resguardados del bullicio del exterior como para olvidar por un momento que te encuentras en el corazón de una gran ciudad.
Por otro lado, el Spa de la Reyna es uno de los grandes tesoros del hotel, sobre todo si eres amante de los tratamientos holísticos. Todo inicia con la elección de los aceites esenciales para la aromaterapia, seguido de un servicio completo de masajes y faciales. La experiencia culmina con una bebida y termoterapia de semillas en cortesía para terminar de forma armoniosa y serena. Para quienes no son huéspedes, al reservar un servicio en el spa, podrán acceder también a la alberca y al jacuzzi.
El restaurante
Además de un hotel en el Centro Histórico de Puebla, Casareyna ofrece también uno de los restaurantes tradicionales que no te puedes perder si quieres probar una auténtica cocina poblana. Ganador del premio ‘Mejor restaurante de hotel del país’ en 2018, esta es una parada obligada para todo foodie que visite la ciudad. Ahí encontrarás platillos de sazón casero, preparados con ingredientes frescos y la mejor técnica para resaltar el carácter barroco de esta gastronomía.
Abren todos los días desde el desayuno hasta la cena, y podrás elegir sentarte en sus salones interiores, o bien, en sus patios y terrazas. Como sabemos, la cocina poblana está llena de platos de temporada tan ceremoniosos como los chiles en nogada y el mole de caderas, pero también delicias de la tierra como los escamoles, los gusanos de maguey y los huitlacoches, los cuales podrás degustar en Casareyna siempre que llegue el momento.
Finalmente, Casaryna cuenta con una extensa cava de vinos que aunque tiene varias botellas de las vinícolas internacionales más prestigiosas, hace especial énfasis en las etiquetas nacionales, provenientes de vinícolas en Parras Coahuila, Baja California, Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, Zacatecas e incluso algunas en Puebla. Si lo tuyo son los destilados y la coctelería, ofrecen también un bar especializado en tequilas y mezcales.
¡Viajen, disfruten y compartan!