No es secreto que México cuenta con increíbles maravillas de la naturaleza, pues cada uno de sus estados tiene espacios preciosos donde puedes relajarte y disfrutar de diversas actividades. Uno de los entornos naturales más bonitos son las cascadas, y de los mejores lugares para encontrarlas es Chiapas. No obstante, ¿cuáles son las mejores? En esta ocasión te traemos las cascadas en Chiapas que debes visitar cuanto antes.
¡Descúbrelas todas!
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Cascadas de Agua Azul
Uno de los estados más destacados de Chiapas es Palenque, hogar de impresionantes zonas arqueológicas, maravillas naturales y del corazón del estado: la Selva Lacandona. De esta manera, no es sorpresa que aquí también sea donde se encuentran las Cascadas de Agua Azul. Esta belleza natural es una de las más conocidas en este lugar debido a la magia que esconde: aguas cristalinas de un intenso color azul rodeadas de una vasta vegetación.
Como las cascadas forman varios niveles –como en escalones–, se crean diversas pozas, albercas naturales de agua dulce donde se puede nadar. Adicional a esta actividad, se puede practicar senderismo entre la naturaleza, visitar los puestecitos a su alrededor para comprar artesanías, probar platillos deliciosamente tradicionales chiapanecos, o pasar la noche en una cabaña.
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Cascadas Roberto Barrios
Si bien las Cascadas de Agua Azul son un destino alucinante, es verdad que por su popularidad pueden llegar a ser bastante concurridas. Pero no temas, Chiapas tiene una solución para todo y no te defraudará. Así, otra opción igual de deslumbrante pero menos conocida son las Cascadas Roberto Barrios. Ubicadas a 14 km del centro de Palenque, estas se destacan por sus aguas turquesas y verde esmeralda, sus pozas de agua cristalinas y la tranquilidad de la naturaleza que las rodean.
Este paraíso está formado por alrededor de cinco mini cascadas distintas, las cuales forman diversas piscinas naturales con diferentes profundidades. Se puede nadar libremente o rentar un chaleco salvavidas. Y si eres más intrépidx, se puede caminar río arriba –con precaución y zapatos antideslizantes–. No hay lugares para hospedarse ahí, sin embargo, en una de sus entradas cuentan con un restaurante con diversas opciones para comer.
Cascada Misol-Há
A diferencia de las anteriores, donde cascadas de diversos niveles crean albercas naturales, la Cascada de Misol-Há es una sola caída de agua que alcanza más de los 30 metros de altura y forma una enorme poza natural, dando la impresión de ser un mágico cenote. Teniendo cautela de no acercarse demasiado a la cascada, nadar en sus bellas aguas transparentes es una experiencia única para conectar con la naturaleza.
Después de refrescarte en el agua dulce, puedes conocer la gruta que se esconde detrás de la cascada. Pese a que es poco profunda, la brisa de la caída de agua es muy relajante y te da otra perspectiva del área. Después, para finalizar tu recorrido, puedes hacer un pequeño tour entre la selva, practicar senderismo y llegar al mirador de la parte superior de la cascada. El lugar cuenta igual con cabañas y se encuentra a 20 kilómetros de la Zona Arqueológica de Palenque.
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Cascadas Tulijá
Viajando hacia el oeste de Chiapas, es posible llegar al municipio de Salto de Agua y a la siguiente maravilla natural: las Cascadas Tulijá. Gracias al Río del mismo nombre y a los minerales de carbonato de calcio en su interior, se crean impresionantes formaciones de agua de un tono azul precioso.
Al estar rodeadas de un gran ecosistema, las Cascadas Tulijá son un paraíso natural que sólo Chiapas nos puede dar. Además de nadar, se puede recorrer sus alrededores a caballo, pasar el río en kayak, tomar fotitos, practicar pesca, avistamiento de aves o senderismo. Eso sí, es importante seguir las instrucciones de las autoridades y mantenerse alerta de las corrientes del río.
Cascadas el Chiflón
Si aparte de nadar buscas una experiencia completa de ecoturismo, dirígete al municipio de Tzimol, más al sur del estado. Ahí encontrarás las Cascadas el Chiflón, una cadena de cinco caídas de agua de distintas alturas en un cerro que forman un gran centro natural recreativo. Las cascadas por sí solas son un espectáculo de la naturaleza, alcanzando los 25, 30, 53, 60 y la más alta, los 120 metros de altura.
Eso sí, para conocerlas todas, debes atravesar 970 escalones, así que te recomendamos estar preparado y llevar una buena actitud. Puedes disfrutar de las aguas azules de las pozas que se forman por la caída del agua, atravesar las cascadas en tirolesa, practicar senderismo, ciclismo de montaña, comprar artesanías en sus puestecitos, comer gastronomía chiapaneca, y pasar la noche en una cabaña o acampar cerca de la zona.
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Cascadas El Aguacero
Para los amantes de la aventura, el senderismo y las actividades dentro de la naturaleza, las Cascadas el Aguacero les brindarán la oportunidad de conocer Chiapas a su manera. Ubicadas dentro de la Reserva de la Biosfera Selva el Ocote, muy cerca del pueblito mágico de Ocozocoautla de Espinosa, la caída de agua de estas cascadas se precipita entre rocas, lo cual hace que su descenso se convierta en una intensa brisa en forma de aguacero.
Para llegar, es necesario bajar por 740 escalones, pero como todo tesoro escondido de la naturaleza, al llegar al destino, su belleza hará que se te olvide el esfuerzo. Al adentrarte al abismo natural, podrás conocer una serie de cuevas, una con un río subterráneo y otra con una impresionante caída de agua. En este lugar podrás conectar con el entorno de Chiapas, su flora y su fauna, y vivir una experiencia inolvidable.
