Ubicado en el centro de San Miguel de Allende se encuentra un recinto gastronómico donde los platillos son monchosos y el cerdo es producto privilegiado. Pork Belly Restaurante, a cargo del Chef Erick Medina Guisa, inspira sus originales creaciones en los ingredientes tradicionales de México, el producto local y el cerdo. Con un amplio y exquisito menú, ideal para carnívoros y vegetarianos, es uno de los restaurantes imperdibles durante tu próxima visita a San Miguel de Allende.
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Tal vez hayas escuchado hablar del platillo que inspira el nombre del restaurante, el Pork Belly. Proveniente de la gastronomía china y con reciente popularidad entre las cocinas internacionales, es un corte que se obtiene de la panza del cerdo y, al ser rico en grasas y prepararse con un método de cocción lento, resulta en una carne de textura crujiente por fuera y suave por dentro. Es el eje central de Pork Belly Restaurante, cuyo menú carga con todo su delicioso sabor.
Pork Belly Restaurante cuenta con la característica atmósfera despreocupada y jovial de San Miguel de Allende, con dos pequeños jardines al aire libre, una acogedora zona interior y una cocina abierta que permite disfrutes los olores y sabores de sus creaciones desde el momento de su preparación. Además de contar con un exquisito – y muy monchoso – menú de alimentos, también posee una oferta de cócteles originales a cargo de Ignacio Ávila.
Te recomendamos preguntar por las bebidas de temporada, ya que probablemente te encuentres con una agradable sorpresa que deleitará tu paladar. Como su Ponchito Autumn, elaborado con motivo del Día de Acción de Gracias. Con base de atole de maíz crudo, concentrado de guayaba y especias, infusión de café, mezcal, licor de maíz, y adornado con un deshidratado de guayaba con totomoxtle, busca transmitir en un cóctel la sensación de tomar un atole calientito y tradicional.
Si te gustan los sabores otoñales, puedes probar su Pumpkin Spice Latte. Lo que lo hace tan especial es que lo preparan a base de puré natural de calabaza, con un jarabe especiado – jamaica, clavo, anís y canela -, leche de almendras espumada y un ligero toque de cardamomo. Te encantará.
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La carta de Pork Belly Restaurante incluye desayunos, comidas y cenas. Entiende que no todos sus comensales son amantes de la carne y la comida pesada, por lo que asegura opciones adaptables a cualquier paladar, y cuenta con platillos vegetarianos y ligeros. Uno de sus musts, por más sencillo que parezca, son sus frijoles refritos con tocino. Al ser un lugar especializado en cerdo, no es sorpresa que su tocino tenga la textura perfecta y un exquisito sabor ahumado, haciéndolo una de las entradas más ricas para arrancar bien tu comida.
Y manteniendo a México presente, Pork Belly Restaurante cuenta con una sección dedicada especialmente a los tacos. Todos son altamente recomendables, y los hay para todos los gustos y preferencias. Los de pulpo ahumado a la plancha, sazonados con paprika, ajo, perejil y alioli con chile de agua tatemado, son de lo mejor.
También encontrarás variedad de sándwiches, perfectos para quienes sean de buen apetito. Si corres con suerte, puede que te topes con alguno de temporada. Si no, con su clásico Sándwich BLT no hay pierde, preparado con tocino, lechuga y tomate, y acompañado de crujientes papas a la francesa. Si lo tuyo son las creaciones quesosas, prueba su Brisket Grilled Cheese, relleno de brisket de res, bañado en abundante queso y servido también con una porción de papas a la francesa.
Pork Belly Restaurante le da un giro original a las tradicionales hamburguesas. Con opción vegetariana, así como de variedad de carnes para que elijas tu preferida. La de Pulled Pork es una de las favoritas de la casa, preparada con pan brioche, pierna de cerdo con BBQ de la casa, con mayonesa rosa, ensalada de repollo, zanahoria, queso Monterrey y papas a la francesa. No puedes dejar de probarla.
