Primitivo: cocina de humo bajo un encino de más de 300 años en Valle de Guadalupe

Valle de Guadalupe es uno de los destinos gastronómicos más sorprendentes del norte de México, cuya riqueza biodiversa se traduce en una cocina rica y de cuidado preciso al origen de los ingredientes. Entre sus muchas joyas culinarias se encuentra Primitivo, un restaurante a cargo de la chef Carolina Jiménez que comparte una experiencia íntima y natural, ubicado bajo un precioso árbol antiguo y compartiendo un espacio único que vale la pena descubrir.

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Foto: @primitivo_mx

Primitivo es uno de los restaurantes pertenecientes a Valle de Guadalupe, compartiendo una propuesta inspirada por los ingredientes endémicos de la región, que a su vez se preparan con variedad de técnicas que privilegian el fuego, la leña y el humo. Se trata de uno de los recintos liderados por la chef Carolina Jiménez, quien se encarga de crear una experiencia excepcional en la que se pueda disfrutar la totalidad del animal en su forma más primitiva.

Foto: @primitivo_mx

Tan solo el espacio de Primitivo es excusa perfecta para visitarlo, resguardado bajo un precioso árbol de encino con más de 300 años de antigüedad, que a su vez brinda sombra a preciosas mesitas de madera al aire libre y crea una atmósfera refrescante. Por las tardes se pueden disfrutar escenarios de belleza natural, mientras que por las noches estos se complementan con un sinfín de lucecitas colgantes que crean un entorno más romántico.

Foto: @primitivo_mx

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El menú de Primitivo busca domar el fuego, el animal y los vegetales, esto a través de preparaciones cocinadas exclusivamente a la leña, así como platos de temporada que se adaptan a los ingredientes disponibles y los productos de temporada. Se diseñó para disfrutarse al centro de la mesa, creando una atmósfera placentera y de compartir constante.

Foto: @primitivo_mx

Algunos de los últimos platos disponibles en Primitivo fueron sus papas finamente laminadas y fritas sobre fuego directo con tripa doradita, sus costillas de res mexicalense ahumadas en exterior por 20 horas –este proceso se realiza para lograr tener una capa ahumada y que estén más jugosas–, y su piña tatemada recubierta de jarabe ahumadocon coco caramelizado.

Foto: @primitivo_mx