Con una apertura reciente, Ludlow es un restaurante al sur de la CDMX que la está rompiendo y no es para menos, pues este ‘place to be’ basa su concepto en un bistró de estilo neoyorquino en donde la comida, música, drinks y ambiente son determinantes dentro de un mismo espacio. Tanto así que este nuevo spot buscó un lugar que hiciera sentido con su experiencia ‘Feel Good Kitchen’, eligiendo Mítikah, uno de los centros comerciales más bonitos de la ciudad como el escenario ideal que acerca al comensal a encontrar un rinconcito para degustar platillos icónicos lejos de la multitud.
Su concepto nace a través de un viaje al pasado y un guiño a la nostalgia de los años mozos de la calle Ludlow, en la Gran Manzana. Pues fue aquí donde la escena artística mundial de los 90s y los 2000 ‘s vivió su apogeo, misma que perpetuó como portada del álbum Pauls Boutique del grupo de Hip Hop, Beastie Boys. Fue entonces que bajo está influencia de expresión musical, cultural y diversidad, Alejandro Bracho–su fundador-lo conceptualizó como un bistró de esos locales gastronómicos típicos franceses que también forman parte de la escena neoyorquina.
En este restaurante al sur de la CDMX los sabores más vibrantes no tienen límites, gracias a que el chef Guillermo Chacon creó un menú tan único como cautivador, en donde la Deep Dish Pizza es el plato insignia y está inspirada en el clásico platillo de Chicago. O bien su Philly Cheesesteak o sus ya famosas Coles de Bruselas acompañadas de un fumet de pescado y tocino que dejan en claro los sabores de la carta. En donde además es posible encontrar café, bakery y brunch todo el día.
En cuanto a los postres, Ludlow cuenta con varias opciones dentro de su menú que van desde los clásicos postres americanos como el Key Lime Pie y el Cherry Cobbler, pero también de un tradicional brownie y mousse de chocolate que cautivará a los amantes de lo dulce en este restaurante al sur de la CDMX. Sin olvidar su espectacular e hipnotizante New York cheesecake, chocolate cookie y sus helados de temporada.
Para la carta de bebidas, Ludlow ofrece un vino de la casa–un tinto joven–, con seis meses de barrica producido en Valle de Guadalupe. Seguido de dos etiquetas más de tinto con 12 y 14 meses de barrica. En cuanto a la coctelería crearon 10 cócteles, uno de los favoritos es el West Village, elaborado a base de café, cerveza de jengibre y ginebra, un drinks ideal para acompañar los platillos o simplemente para disfrutar de una curada mixología cuando cae la noche.