Debido a las precauciones que se están tomando para evitar un mayor contagio del virus Covid-19, muchas oficinas en México y el mundo están tomando precauciones para mitigar el impacto, por lo que cada vez más empresas han dado la orden de llevar el trabajo a casa.
Si estás a punto de hacer home office por primera vez, no entres en pánico. Aquí te tenemos siete consejos que te ayudarán a ser más eficiente y a organizarte mejor.
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Escoge tu espacio ideal para trabajar
El sueño es trabajar desde tu cama, pero no es la mejor decisión –ya que puede que le tomes más cariño a descansar que a trabajar–. Lo ideal es que escojas un lugar tranquilo y ventilado, cerca de una ventana para que el aire fresco te ayude a estar concentrado. Tener un escritorio organizado contribuirá a que seas más productivo.
Escribe una lista de tareas
Es muy importante que tengas claro qué es lo que quieres hacer y las tareas que deseas completar cada día. Escribir una ‘to do list’ te ayudará a ser más ordenada/o y te motivará a trabajar para que al final del día no tengas más tareas pendientes. Puedes hacer la lista en una un post-it que mantengas pegado en tu escritorio o una libreta, que siempre tengas a la mano. Recuerda tachar los recuadros conforme vayas completando tus tareas.
Mantén tu rutina
Que no salgas a la oficina no es una excusa para estar todo el día en pijama. Sigue tu rutina como si nada hubiera cambiado: levántate temprano, báñate, ponte ropa casual –pero cómoda– y recuerda mantener tus horarios de comida. Esto te ayudará a ser más productivo y que no sea difícil regresar a la rutina en un par de semanas.
Delimita tus horas de trabajo
Tener total libertad para poder
determinar qué tanto tiempo trabajas y cuánto no es una bendición. Pero debes
mantener tus propios límites: no debes exceder tus horas de trabajo ni
procrastinar hasta niveles indebidos. Establece un horario similar al que
tienes en la oficina para que no pases tiempo trabajando de más.
Date permiso de descansar un rato
De vez en cuando necesitarás darte un respiro y dejar descansar a tu cabeza por un rato. Para motivarte, es muy sano darte una recompensa después de trabajar un par de horas. Puedes mantener cerca de tu zona de trabajo algún distractor: un libro, un juego en el celular o tu instrumento musical favorito y cronometrar tu tiempo libre para después regresar al trabajo. Sin embargo, debes recordar guardarlo o esconderlo para que no se vuelva una tentación después.
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Evita comer mientras trabajas
Comer frente al ordenador parece ser buena idea para ahorrar tiempo. Sin embargo, no es la mejor opción porque no te das tiempo de descansar la mente y concentrarte en tu comida, y tampoco te ayuda a ponerle atención que requiere tu trabajo. Además, no es higiénico.
Pero si eres de esos que necesitan estar picando comida para concentrarte, puedes prepararte un snack con verduritas –como zanahoria, jicama y pepino rallados– para darle un toque crunchy y saludable a tu rutina que puede estimularte mientras sigues dándole al trabajo.
Toma agua constantemente
Mantenerte hidratada/o
es indispensable para estar fresco y concentrado. ¡El agua siempre será tu
aliada!, así que recuerda beber mínimo dos litros diarios y tomar infusiones
constantemente.
Nota: Aunque estés en casa, recuerda seguir las recomendaciones sanitarias. Lávate las manos frecuentemente y practica tu forma de toser y estornudar (recuerda cubrirte la cara con el antebrazo). Esto es una buena manera de formar hábitos y que, una vez restaurada la normalidad, nos ayudarán a evitar pandemias en un futuro.
Foto de portada: Paige Cody en Unsplash