Se sabe que México cuenta con una diversidad natural sorprendente, que abarca desde preciosos paisajes submarinos hasta algunas de las cimas más altas en todo el mundo. Colima es sede de uno de sus volcanes más activos que, a pesar de su impresionante historia de erupciones a lo largo de los años, se puede visitar desde una distancia responsable, lo que sin duda alguna permite apreciar algunos de los panoramas más espectaculares en el estado.
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El Volcán de Colima, conocido popularmente como Volcán de Fuego, se encuentra catalogado como uno de los volcanes más peligrosos en todo México. Se ubica justo entre los límites de Jalisco y Colima, con una altitud de 3960 metros sobre el nivel del mar y una historia de actividad volcánica bastante intimidante. A pesar de ello, no puede negarse que ofrece algunos de los panoramas naturales más impresionantes en México.
Esta maravilla de la naturaleza se cataloga como un estratovolcán, lo que significa que es un tipo de volcán cónico y compuesto por diversas capas de lava endurecida, que a su vez alberga lava altamente viscosa y que suele endurecerse rápidamente. Tiene múltiples registros de actividad volcánica, siendo los más importantes durante los años de 1914, 1961 y 1991; a causa de esto, únicamente se puede visitar el Volcán de Colima desde ocho kilómetros de distancia, lo que en realidad resulta como una ventaja ya que permite apreciar vistas más panorámicas.
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Si bien visitarlo infiere un ligero peligro de erupción, este volcán en México no deja de atraer visitantes nacionales e internacionales, desde amantes de la naturaleza en búsqueda de actividades de conexión medioambiental hasta científicos interesados en estudiar sus características geológicas. La sugerencia es optar por un recorrido a cargo de un guía especializado –algunos populares son Viator o Gdl Tours–, ya que complementarán la experiencia con demás atractivos en la zona.
Cabe destacar que el Volcán de Colima se encuentra rodeado de algunas plantaciones de café, lo que no solo brinda paisajes únicos en Colima, sino que permite descubrir el proceso de producción detrás de este grano mexicano. También vale la pena aprovechar la visita para descubrir el Pueblo Mágico de Comala, ubicado aproximadamente a hora y media desde el volcán y con un territorio lleno de historia nacional.